Una tarde por Alcalá de Henares

Empezamos nuestro paseo contemplando el monasterio de San Bernardo, uno de los mejores edificios del Barroco español. Fundado para religiosas cistercienses por el cardenal Sandoval y Rojas en 1618. La construcción de este gran edificio conventual fue, desde sus inicios, un motor de transformación urbana de esta zona de la ciudad. Planteado en estrecha relación con su entorno, la pazo formada por convento de la Madre de Dios, el palacio Arzobispal y la fachada de la Bernardas constituyen, sin duda, uno de los conjuntos más trayentes de toda Alcalá.
Seguimos hacia la Puerta de Madrid de 1788 un monumento histórico de esta ciudad. La edificación es de piedra con frontón y rótulo de estilo neoclásico, presentando el aspecto de un arco de triunfo.
Continuamos paseando, llegamos a la biblioteca cervantina, antiguo convento de los Trinitarios Descalzos, gran ejemplo de las glorias y miserias de la ciudad de Alcalá de Henares. Después de su nacimiento, para unos frailes pobres, pasó a ser impulsado por un noble de origen genovés, convirtiéndose ya en el siglo XIX en cuartel de caballería militar, después Comandancia Militar y en los últimos años se restauró y alberga el universitario instituto Franklin de investigación en Estudios Norteamericanos.
Seguimos nuestro paseo por Alcalá y llegamos a la Iglesia de Santa María, donde se puede ver una gran cúpula perteneciente a la Capilla de las Santas Formas. La historia de estas Santas Formas data del siglo XVI.
Terminamos nuestra visita en la ermita del Cristo de Los Doctrinos, de arquitectura popular, del más puro barroco castellano. Posee una recoleta capilla, en la que se puede contemplar la talla del Cristo de los Doctrinos, obra manierista del jesuita Domingo Beltrán, además de una excelente colección de arte religioso de los siglos XVI y XVII. En 1942 fuer declarado monumento inmueble del patrimonio histórico español.
¡Una bonita tarde recorriendo esta grande, histórica y bella ciudad de Alcalá de Henares.

Conchi Ortega. Alumna de nivel II B.